La ciudad de La Plata atraviesa un escenario crítico en materia de seguridad vial: en apenas nueve meses, los siniestros ya se cobraron la vida de 58 personas, una cifra que supera las 57 muertes contabilizadas en todo 2024.
El dato se conoce tras una seguidilla de hechos fatales ocurridos en los últimos días. Uno de ellos fue el de Jorge Raúl Barzabal, que falleció tras un fuerte choque entre su moto y un auto en la avenida 122. A esto se suma el de Martín Ramón Valdez, vecino que murió en la Ruta 215 al ser embestido por un camión, y el de Natalia Soledad Liporace, una joven de 26 años que perdió la vida luego de un accidente en la esquina de 3 y 51.
Más allá de las obras de bacheo y reparación encaradas por el municipio, la ciudad arrastra años de desgaste en su infraestructura vial: calles deterioradas, pozos, lomas de burro sin señalizar y hasta rieles de tranvía en desuso siguen representando un peligro.
El panorama es aún más preocupante si se considera que la mayoría de las víctimas fatales son motociclistas. En 2024, 32 de los 57 fallecidos circulaban en moto, una tendencia que se repite este año. La falta de controles efectivos, el crecimiento del parque motovehicular y la presión por los tiempos de entrega en el caso de los repartidores configuran un cóctel riesgoso.
Expertos coinciden en que la respuesta debe ser urgente: endurecer la fiscalización, reforzar la educación vial y generar políticas que desincentiven la conducción temeraria, especialmente en motos. De lo contrario, el drama vial seguirá cobrando vidas en las calles platenses.