El Gobierno de la Provincia de Buenos Aires confirmó que retomará la construcción de la planta de efluentes cloacales en Saladillo, obra que había quedado paralizada por decisión del presidente Javier Milei pese a contar con un 88% de avance. El anuncio fue realizado tras una reunión entre el intendente José Luis Salomón y funcionarios bonaerenses.
Del encuentro participaron el ministro de Infraestructura y Servicios Públicos, Gabriel Katopodis, y el subsecretario de Recursos Hídricos, Néstor Álvarez, quienes ratificaron la decisión política de la Provincia de continuar la obra una vez resuelta la situación contractual con la empresa a cargo.
Según detalló la municipalidad de Saladillo, el Ejecutivo nacional debe rescindir el contrato vigente para permitir una nueva licitación de los trabajos pendientes. Hasta tanto se resuelva esa instancia administrativa, la Provincia mantiene el compromiso de finalizar el proyecto.
En la reunión también se abordó la tercera etapa del plan de desagües cloacales para la ciudad, una obra complementaria que busca ampliar la cobertura de servicios básicos en el distrito.
La planta de efluentes cloacales es considerada fundamental para mejorar la calidad ambiental y sanitaria de la ciudad. Su ejecución había sido detenida a comienzos de 2025, cuando el Gobierno nacional resolvió suspender numerosos proyectos de infraestructura en el marco de su política de ajuste.
El intendente Salomón y el secretario de Obras Públicas, Guillermo Candia, insistieron en la necesidad de garantizar la finalización de los trabajos. “La continuidad de esta obra es esencial para la comunidad”, remarcaron en el comunicado difundido por la Comuna.
La paralización de la obra por parte de la administración de Milei generó fuertes críticas en la ciudad, donde el proyecto tenía avances significativos. Desde el Ejecutivo bonaerense destacaron que la decisión de retomar los trabajos refleja la importancia de garantizar servicios básicos más allá de los cambios en la política nacional.
“El objetivo es resolver los obstáculos administrativos y dar continuidad a una obra prioritaria para Saladillo”, explicaron desde el Ministerio de Infraestructura provincial.
Con la finalización de la planta, se espera una mejora sustancial en el tratamiento de efluentes y una ampliación de la red cloacal, beneficiando a miles de vecinos. Para el distrito, representa además un paso clave en el fortalecimiento de la infraestructura urbana y en la mejora de las condiciones de vida.
La definición de la Provincia de Buenos Aires reabre expectativas en la comunidad de Saladillo, que aguarda desde hace meses la culminación de un proyecto que quedó en pausa pese a estar prácticamente terminado.