El programa Aprendiendo a Nadar volvió a desarrollarse este año en natatorios municipales y alcanzó a más de 7.500 estudiantes de cuarto grado de escuelas públicas del distrito. La iniciativa combina aprendizaje, inclusión y prevención, y se consolida como una política pública sostenida en el tiempo.
Un año más, miles de chicos y chicas de Lomas de Zamora tuvieron su primer contacto con una piscina a través del programa Aprendiendo a Nadar, una propuesta que garantiza clases gratuitas de natación para estudiantes de cuarto grado de escuelas del distrito. La experiencia no solo apunta al aprendizaje deportivo, sino que cumple un rol central en materia de salud, seguridad y bienestar.
Las clases se desarrollan en los natatorios municipales, donde los y las estudiantes asisten en el marco de una propuesta pedagógica articulada con las escuelas. Aprender a nadar desde edades tempranas permite incorporar nociones básicas de seguridad acuática, reducir riesgos y fortalecer la autonomía de los chicos y chicas, especialmente durante la temporada de verano.
Durante este año, el programa alcanzó a 7.500 estudiantes de más de 100 escuelas de Lomas. Cada uno de ellos recibió su traje de baño, lo que garantiza igualdad de condiciones para participar y refuerza el carácter inclusivo de la política. Para muchas familias, se trata además de la primera oportunidad de acceso de sus hijos a una pileta.
Aprendiendo a Nadar se sostiene como una política pública que trasciende lo recreativo: promueve el cuidado de la salud, la prevención de accidentes y la integración escolar, al tiempo que acompaña a las familias con una propuesta concreta que combina derechos, aprendizaje y disfrute.