Tras la contundente derrota que electoralmente sufrió La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires —con casi 14 puntos de diferencia frente al peronismo—, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, admitió que “es hora de hacer autocrítica y ver en qué fallamos, porque los resultados macroeconómicos no llegan a la gente”. Reconoció que esa desconexión pudo haber generado una percepción desfavorable y anticipó que el espacio oficialista se enfocará en las próximas elecciones legislativas nacionales del 26 de octubre para revertir ese escenario.
Francos sostuvo que tal vez el gobierno transmitió cierta “sensación” que no caló bien entre la población y que eso debe corregirse. Destacó la relevancia de las elecciones nacionales, porque solo con suficiente representación legislativa será posible avanzar con reformas clave, como las laborales y tributarias.
El funcionario admitió que parte del problema radica en que el déficit fiscal y financiero del 2023, que alcanzó el 15 % del PIB, obligó al Ejecutivo a priorizar ciertos temas por sobre otros que también resultan importantes para la población. Esto, reconoció, generó una brecha entre lo que el gobierno propone como política y lo que la gente percibe como relevante o tangible.
Francos enfatizó que la derrota es compartida por todo el equipo de gobierno: “Cada uno ha cometido los errores que le caben, nadie de esto sale limpio. Todos somos partes del mismo proyecto”, concluyó, subrayando su compromiso de corregir el rumbo sin cambiar los pilares de la gestión económica.