sábado 15 de febrero de 2025 - Edición Nº1263

Lomas de Zamora | 13 ene 2025

ESCAPADAS

Paisajes serranos y vinos con identidad en una escapada única de fin de semana

Esta ciudad de la Provincia se destaca como un destino emergente en la vitivinicultura. Su Ruta del Vino combina paisajes, bodegas boutique y experiencias únicas.


En los últimos años, la provincia de Buenos Aires ha sorprendido con el desarrollo de una vitivinicultura emergente que combina paisajes únicos, tradición y vinos de alta calidad. Las regiones productoras, marcadas por suelos distintivos y climas favorables, apuestan por pequeñas producciones que destacan por su autenticidad y conexión con el entorno natural.

El turismo enológico se ha convertido en una tendencia en crecimiento en la provincia, atrayendo a amantes del vino y curiosos en busca de experiencias diferentes. Recorrer viñedos, participar en vendimias y disfrutar de maridajes con productos locales son algunas de las actividades que complementan la propuesta, posicionando a Buenos Aires como un destino vitivinícola de relevancia nacional.

La región de Tandil sorprende con vinos serranos de calidad. Su Ruta del Vino, rodeada de naturaleza y tradición, ofrece experiencias turísticas inolvidables, posicionándose como un destino clave del enoturismo argentino.

En Tandil, el gobierno de Axel Kicillof puso en marcha obras en el marco del Programa de Infraestructura Universitaria, con el que la Provincia de Buenos Aires busca reactivar en casas de estudio nacionales ubicadas en territorio bonaerense obras que el Gobierno Nacional dejó de financiar (en una primera etapa serán 20 proyectos). En este caso, se restaurará la fachada del edificio del Rectorado de la Universidad Nacional del Centro.

Tandil: El secreto serrano de la vitivinicultura bonaerense

La provincia de Buenos Aires, conocida por sus llanuras y costas, también es hogar de una creciente industria vitivinícola en Tandil. Con un paisaje serrano único, suelos especiales y un clima ideal, esta región se consolida como un referente para los amantes del vino.

La Ruta de los Vinos en Tandil

Tandil no solo atrae por su gastronomía tradicional como el salame y los quesos, sino también por su innovadora propuesta enológica. La Ruta del Vino incluye bodegas boutique que producen varietales como Malbec, Pinot Noir y Sauvignon Blanc, destacando tanto por su calidad como por su conexión con el terroir local.
Entre las bodegas imperdibles se encuentran:

  • Bodega Cordón Blanco: Reconocida por sus vinos boutique y visitas guiadas que muestran todo el proceso de producción.
  • Bodega Cerro Blanco: Enfocada en la producción orgánica, con un Malbec especialmente valorado.
  • Bodega Saldungaray: Ubicada en Sierra de la Ventana, complementa la oferta vitivinícola de la región bonaerense.

Más que vino: Naturaleza y experiencias

La Ruta del Vino de Tandil ofrece actividades como caminatas por viñedos, recorridos en bicicleta y degustaciones maridadas con productos locales. Incluso, participar en la vendimia es una opción para quienes buscan vivir el proceso completo de la producción vitivinícola.



Reconocimiento y proyección

Los vinos tandilenses han ganado premios nacionales por su calidad, aroma y originalidad. Este auge impulsa su posible declaración como región vitivinícola oficial, lo que potenciaría aún más su desarrollo y atractivo turístico.
Turismo enológico: Un motor de crecimiento
El enoturismo en Tandil no solo beneficia a las bodegas, sino que dinamiza toda la región. Hoteles, restaurantes y guías turísticos integran experiencias que giran en torno al vino, diversificando la oferta y atrayendo a nuevos visitantes.

Tandil, con su Ruta del Vino, demuestra que la provincia de Buenos Aires tiene mucho más para ofrecer, combinando tradición, innovación y paisajes únicos que conquistan a todos los sentidos.

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